miércoles, 31 de diciembre de 2008

Valientes...

¡Valientes, sí...valientes! .... y Valiosos
También Mateo 10:37-39 : El que ama a padre o madre más que a mí, no es digno de mí; el que ama a hijo o hija más que a mí, no es digno de mí; y el que no toma su cruz y sigue en pos de mí, no es digno de mí. El que halla su vida, laperderá; y el que pierde su vida por causa de mí, la hallará.
Leer este texto sin leer lo anterior y posterior (contexto) es una pena, lea por favor lea luego desde 9.35 hasta el 12:31 y no deje de leer Lucas 10:1-23.
Cuando miramos esta escena en las Escrituras podemos vernos reflejados en muchas oportunidades de nuestra vida en que, sentimos que la Voluntad de Dios es distinta a la nuestra y nos preguntamos ... ¡Si! Dios Busca valientes, hombres y mujeres dispuestos a todo, o sea, TODO.
La escena se desarrolla cuando Jesús hablaba a aquellos que le seguían o lo deseaban al menos. No era para cualquiera y no cualquiera lo podría resistir. No era fácil, para los que escuchaban estas palabras, debían pensarlo bien, se trataba de darlo todo y ser valiente.
Miremos bien el texto, peor no puede ser! De verdad que hay que ser valiente para seguir a Cristo. Se que este artículo lo están leyendo algunas personas que están dudando, en si sirven a Dios o no, piensan a lo mejor: "¿Obedeceré el llamado o no?" y a la verdad creen que no es el momento oportuno.
Si tú has sido llamado por Dios tienes que saber algunas cosas y esas están en este texto que leemos más arriba. Podría detallarte cada cosa que allí esta dicha, pero necesitaría más que una página, mejor dicho más que un libro, dice en resumen: TODO.
Cuando Dios nos llama, nos pide todo y nos ofrece más. Cuando Dios nos llama, nos pasa de todo y nos guarda de todo. Cuando Dios nos llama, perdemos todo lo de poco valor y ganamos lo más valioso. Si tú hoy eres llamado por Dios para servir, tienes que decidir valientemente, no es esto para cualquiera, más bien medita en oración y busca a Dios y si este es el llamado ¡Síguelo con todo tu corazón! No tengas miedo, sé valiente, mira las dificultades como oportunidades, y dale la oportunidad a Dios de usarte en este desafió que es llevar las buenas nuevas. ¡¡Somos valiosos para Dios!! ¡¡Somos sus hijos, su precioso tesoro y posesión!! Nuestro valor no depende de lo que otros piensan de nosotros o de lo que nosotros pensamos de nosotros mismos.
La manera como Dios nos ve determina nuestro valor.
Hay un ejemplo que leí en un libro y ejemplifica esta realidad: "Una persona ajena a las artes puede tirar una obra de arte a la basura. ¿Eso haría que la obra carezca de valor?
En absoluto. El verdadero valor de la obra está dado por la observación de un coleccionista de arte que dice: Esta es una obra invaluable y estoy dispuesto a pagar el precio más alto por ella". ¡¡Para Dios nuestra alma vale más que el mundo entero!! Dios envió a Su Hijo a la cruz por amor a nosotros. Él pagó el alto precio. Dios nos acepta y nos da el especial valor...a través de Su gracia. "Pero vosotros sois linaje escogido, real sacerdocio, nación santa, pueblo adquirido para posesión de Dios, a fin de que anunciéis las virtudes de aquel que os llamó de las tinieblas a su luz admirable"
1ª Pedro 2:9 Somos especiales para Dios porque:
*Somos la sal de la tierra ( Mateo 5:13)
*Somos la luz del mundo ( Mateo 5:14)
*Somos hijos de Dios (Juan 1:12)
*Somos parte de la vid verdadera, y un canal de la vida de Cristo (Juan 15:1,5)
*Somos amigos de Cristo (Juan 15 15)
*Somos coherederos con Cristo, compartiendo Su herencia con El (Romanos8:17)
*Somos templo -morada- de Dios Su Espíritu y Su vida mora en nosotros(Gálatas 3:16, 6:19)
*Somos miembros del cuerpo de Cristo (Efesios 5:30)
*Somos una nueva creación (2 Corintios 5 :17)
*Somos santos (Efesios 1;1, 1 Corintios 1:2, Filipenses 1:1, Colosenses 1:2)
*Somos hechura de Dios -Su obra especial- nacidos de nuevo en Cristo para hacer Su obra (Efesios 2:10).
*Somos ciudadanos del cielo. Fil.3:20
*Somos escogidos de Dios, santos y amados. Col.3:12
*Somos linaje escogido. 1ªPe.2:9-10
¡Que este año 2009 podamos vivir de acuerdo a todo lo que somos en Cristo, glorificándole con nuestras vidas y mostrando a otros la extraordinaria grandeza de nuestro Dios!
Pues Dios, que dijo que de las tinieblas resplandecerá la luz, es el que ha resplandecido en nuestros corazones, para iluminación del conocimiento de la gloria de Dios en la faz de Cristo. Pero tenemos este tesoro en vasos de barro, para que la extraordinaria grandeza del poder sea de Dios y no de nosotros." 2ª Co. 4:6-7.

martes, 16 de diciembre de 2008

Cierra la puerta si quieres hablar con Dios...

Durante mi viaje a Costa Rica me llevé un pequeño libro que encontré en mi bodega mientras buscaba otra cosa.
Su autor, Bob Sorge, atrapó mi atención hace más de 6 años por primera vez. Lo escuché compartir sobre el tema de la lealtad y las decisiones que tomé en aquel momento le dieron un giro muy importante a mi vida.
El libro se llama: Secretos del lugar secreto. El señor Sorge ha pasado los últimos años de su vida dedicado a la oración y contemplación, parte movido por una tragedia personal que lo dejó practicamente sin voz y parte, movido por una sed espiritual que se acrecenta cada día. Aparte, Bob ha estado apartado los últimos dos años en un sabático que le alejó de las pocas conferencias en que enseñaba. Su quebrantada voz le permite hablar por un máximo de 40 minutos y con mucho dolor. Dicho todo esto, me parece que lo que tenga que decir ha de ser digno de ser escuchado.
Su reflexión sobre Mateo 6:6 no presenta nada nuevo. Eso es lo más interesante. Te explico...La pregunta que Bob Sorge hace al inicio del capítulo 2 me es demasiado común y sospecho que para ti también lo es: Luchas frecuentemente con el sentimiento de sentirte desconectado de Dios? Se podría escuchar un coro de gente gritando: SIIIIIII! Es en este momento que la gente tomaría un lápiz y aguantaría la respiración con tal de no perder de un solo sonido que venga de la boca del especialista que imparte un seminario. El secreto está a punto de ser vocalizado. Solo que el secreto no es tan secreto. Jesús lo ha gritado desde hace mucho. Hablo de una práctica piadosa que nos ayuda a lidiar con esa terrible sensación de lejania y desconexión con que los mortales luchamos cuando se trata de orar.
Vamos al grano."pero tú, cuando ores, ve a tu cuarto y cerrada la puerta, ora a tu Padre que está en lo secreto y tu Padre que ve en lo secreto..."
"El lugar secreto es el portal al trono" eso dice Bob. Y es que si creemos lo que Jesús dijo tendremos que considerar que tenemos aquí una clave para la intimidad con Dios. Es buscarlo en lo secreto. La oración personal cuando se da a solas es la antesala para conocer al Padre Celestial que se revela a quienes lo buscan en ese contexto.
He acostumbrado orar en todo lugar desde hace años. El ministerio itinerante me obliga a eso. Horarios distintos para dormir y comer. Nada es rutinario, gente distinta, atrasos en los vuelos o entrevistas no planificadas. Así es mi vida. Hace rato no puedo escoger mi hora favorita del día (la caída del sol) en mi rincón favorito (eso es para mí) para orar.
Me gusta hablar con Dios en donde sea que esté. Sin embargo, debo admitir que algo me ha faltado y creo haberlo encontrado en las palabras de Jesús. He decidido volver a pasar ratos completamente a solas con Dios en la esperanza de que esa sensación deliciosa de intimidad con Dios me vuelva a ser familiar o cotidiana. Te recomiendo considerar el consejo, quizás te cambie la vida.
Escrito por Danilo Montero.

viernes, 12 de diciembre de 2008

No mires atrás...

Dios comienza siempre con el final. Si sabes definir el final, sabes por dónde comenzar.
Si no defines lo que quieres, no sabes por dónde comenzar.El que comienza sin saber a dónde va a llegar, va a cualquier parte, y llegar a cualquier parte no es bueno porque pensamos que fue por suerte o casualidad, que Dios no lo hizo y que nosotros no hicimos nada.
¿Por qué concluyes tan rápido que Dios no quiere? Para concluir que el Señor no quiere darte algo, primero debes chequear si has ido más allá de donde has llegado, debes ver si has orado lo suficiente, y si aún así la respuesta es no, será después.
Dios no juega contigo, si Él lo prometió, lo cumplirá. Él toma en serio tu fe y no la defrauda. Mientras oraba, el Señor me dio una Palabra diciendo: “Dile a mi pueblo que no retroceda, que no vuelvan atrás por nada”. ¡No vuelvas atrás! Sigue adelante, cueste lo que cueste, creyéndole a Dios cada día por algo mejor para ti y los tuyos.

La Palabra del Señor en Jeremías 7:23 dice: “Mas esto les mandé, diciendo: Escuchad mi voz, y seré a vosotros por Dios, y vosotros me seréis por pueblo; y andad en todo camino que os mande, para que os vaya bien”.
Para que te vaya bien, necesitas caminar por el camino que Dios te manda. El problema que muchas personas tienen es que quieren las bendiciones de Dios, más no las órdenes; tienen un Dios para pedir, pero no para ofrecer; tienen un Dios para pedir, pero no para obedecer. Dios tiene órdenes.

Regularmente, la gente define las órdenes de Dios en diez mandamientos. Pero, la definición de pecado que da la Biblia es saber hacer lo bueno y no hacerlo. Cuando sabes cómo presentar un buen reporte y aún así no lo haces, es pecado. Cuando sabes que debes atender un cliente y no lo haces, es pecado.
Dios tiene un mandato y es hacer lo bueno. Es decir, si sabes sacar 100 y sacas 90, estás pecando porque sabes sacar 100.El Señor dice que para que te vaya bien debes andar por el camino que Él te ha ordenado. Si sabes acatar las órdenes de Dios, Él te bendecirá grandemente. El camino del cristiano se hace mientras que obedece.

Cada vez que tienes la oportunidad de elegir entre lo bueno y lo malo, elige lo bueno. Aunque el resultado inmediato no sea el mejor, sigue obedeciendo, porque mientras sigas acatando las leyes de Dios, llegarás al punto donde Él te quiere tener.
Si tienes un negocio en el que debes pasar billetes por debajo de la mesa, déjalo. El camino a la obediencia es el más sencillo, simplemente decides obedecer y no hay más qué hacer. Cuando empiezas a obedecer, comienzas a andar en un camino mejor, el que Dios te ordenó para que te vaya bien.

En el verso 24 la Palabra continúa diciendo: “Y no oyeron ni inclinaron su oído; antes caminaron en sus propios consejos, en la dureza de su corazón malvado, y fueron hacia atrás y no hacia delante”.Dios quiere que vayas hacia delante, no quiere a nadie caminando para atrás. Él nos puso los ojos adelante para que no caminemos hacia atrás. Por ejemplo, no puedes manejar un carro viendo el espejo retrovisor a menos que desees retroceder.
Cada vez que una persona ve hacia atrás, es la primera señal que da, que quiere volver atrás. En Proverbios 30:30, la Biblia dice que el león no vuelve atrás por nada. Nosotros debemos ser como el león que siempre camina hacia delante.
El problema de tu futuro reside en la mirada que vives haciendo al pasado. No vivas de la gloria pasada. ¿Por qué insistes en ver atrás? ¿Quieres volver? ¿Cuánta gente dice que quisieran volver a la época en que sus hijos estaban pequeños? ¿Cuánta gente desea volver a la época en que acababa de convertirse? En lo personal, yo no, estoy mejor así. Mi amor por Dios es superior al que un día tuve, ahora es sensato, objetivo y obediente. Lo otro estaba cargado de emociones, era bonito más no efectivo. Puede que antes brincaras y cantaras aleluya, pero tu vida iba para atrás. Hay quienes tienen la alabanza del cangrejo, alzan bien las manos, pero no caminan para adelante, caminan para atrás.Cuando la gente mide qué tan bien está en el Señor, lo hace midiendo qué tanto se le quedan las escrituras. Dios bendice a los hacedores de las Escrituras, así que actúa conforme a la Palabra de Dios. Aunque no recuerdes dónde queda un pasaje, sé un hacedor de la Palabra.

lunes, 8 de diciembre de 2008

Cantando en la Presencia de Dios

Solemos muchas veces, asociar nuestra vida de oración solo con pedidos y necesidades, la oración sin embargo es una fuente inagotable de experiencias con el Señor, una de estas experiencias es la posibilidad de incorporar el canto en nuestros tiempos de oración personal.
Veamos algunas características del canto en nuestra vida de oración.

1. El canto sea en forma individual o colectiva es expresión de nuestra vivencia con Dios. Cantamos no por simple afición o arte, el canto que elevamos los cristianos ha sido puesto por Dios en nuestros corazones.
“Pacientemente esperé al Señor, y se inclinó a mí, y oyó mi clamor.
Y me hizo sacar del pozo de la desesperación, del lodo cenagoso; puso mis pies obre peña, y enderezó mis pasos.
Puso luego en mi boca cántico nuevo, alabanza a nuestro Dios. Verán esto muchos, y temerán, y confiarán en el Señor” Salmo 40:1-3

2. Lo más importante de este canto no es lo externo sino la condición del corazón que lo entona. “La palabra de Cristo more en abundancia en vosotros, enseñándoos y exhortándoos unos a otros en toda sabiduría, cantando con gracia en vuestros corazones al Señor con salmos e himnos y cánticos espirituales” Colosenses 3:16

3. Cuando cantamos a Dios nuestra mente se reenfoca en las cosas del Reino y en Dios mismo. Estamos en la cultura de la distracción, cada segundo hay una competencia por ganar nuestra atención, que fácil es distraernos, el cantar nos ayuda a reenfocarnos en Dios nuevamente. Salmo 89

4. Cantar a Dios a solas no significa ignorar o anular nuestros sentimientos de tristeza, depresión, soledad, etc, que pudieran existir; todo lo contrario, conscientes de nuestras fragilidades e incapacidades alabamos a Dios y empezamos a mirarnos a nosotros mismo en la perspectiva de quien es Dios. No importa que difícil sea la circunstancia que atravesemos, es posible elevar nuestro canto a Dios. “Después de haberles azotado mucho, los echaron en la cárcel, mandando al carcelero que los guardase con seguridad. El cual, recibido este mandato, los metió en el calabozo de más adentro, y les aseguró los pies en el cepo. Pero a medianoche, orando Pablo y Silas, cantaban himnos a Dios; y los presos los oían” Hechos 16:24-25

5. Para cantar a Dios debemos usar el entendimiento. “¿Qué, pues? Oraré con el espíritu, pero oraré también con el entendimiento; cantaré con el espíritu, pero cantaré también con el entendimiento.” 1 Corintios 14:15

¿Cómo cantar con entendimiento?
a. Asegúrate de entender las palabras y el significado de las expresiones en las canciones que estas usando.
b. Busca un respaldo Bíblico al contenido de la canción. Lee este versículo varias veces y entona nuevamente la canción.
c. Busca siempre nuevas canciones, al repetir demasiado la misma canción se puede perder el sentido de la misma.

Algunos consejos prácticos:


1. Podemos usar diversos métodos para integrar el canto en nuestro tiempo de oración.
a. Canta con un instrumento musical (guitarra, teclado, etc.)
b. Canta con un CD de alabanza y adoración.
c. Canta a capella (solo tu voz)


2. Ten a la mano un cancionero con las canciones que quieres usar para alabar a Dios.

3. Recuerda, no se trata de lo fuerte, entonado, modulado o artístico que pueda ser tu canto, se trata de la expresión verbal de lo que Dios está haciendo en tu vida. Lo que más cuenta es tu corazón.


Francis Castañeda

lunes, 1 de diciembre de 2008

El lider de Alabanza que Dios busca.

El modelo perfecto que Dios nos ha dado para todos los ministerios es el Señor Jesucristo. Él vino a enseñarnos con su ejemplo a ser hijos obedientes, así como él lo fue.
En la función del Líder de Alabanza, una de las cosas más importantes que podemos aprender es expresarnos como hijos, ante un Padre bueno y perfecto. Yo creo que esa es la razón por la que el Señor Jesús indica que es el Padre el que busca adoradores. Mas la hora viene, y ahora es, cuando los verdaderos adoradores adorarán al Padre en espíritu y en verdad; porque también el Padre tales adoradores busca que le adoren. (Juan 4:23)
Jesús glorificó al Padre no sólo con sus canciones (Mr 14:26, Lc 10:21) sino también con sus obras obedientes. Cuando declara: “Yo te he glorificado en la tierra; he acabado la obra que me diste que hiciese” (Juan 17:4), Jesús nos está enseñando que la adoración que el Padre busca es la que se desprende como olor fragante del altar de nuestros sacrificios de servicio, sumisión y obediencia.
Creo que no hay mejor pasaje en las Escrituras del que podemos aprender a funcionar como líderes de alabanza obedientes delante del Padre Celestial, que el que se encuentra en el primer libro de Crónicas, capitulo 25. Los puntos más importantes que aprendemos de este pasaje son:

1. El líder de alabanza que busca el Padre debe ser apartado. Asimismo David y los jefes del ejército apartaron para el ministerio a los hijos de Asaf, de Hemán y de Jedutún, para que profetizasen con arpas, salterios y címbalos…(v.1)
La primera característica de todo siervo de Dios es que es apartado. Esto significa que ha sido “puesto dentro de límites”. En otras palabras, ha aceptado restricciones que son impuestas sobre su vida por aquellos que están en autoridad sobre él, con el fin de desarrollar un carácter íntegro. David escogió a las familias de tres hombres para que fuesen apartados para el ministerio de la música y el canto. Es interesante notar el carácter de los hombres que David escogió, revelado en sus nombres.
Asaf significa “el que reúne”. Era un líder que influía a los que estaban a su alrededor y los reunía con el propósito de adorar. Muchos músicos hoy en día atraen a la gente a causa de su gran talento, pero los reúnen para su propio placer y no para el placer del Padre.
Heman, cuyo significado es “Fiel”, había dado muestras de lealtad y de fidelidad, por lo que fue puesto en una posición de autoridad.
Finalmente, Jedutún, que significa “el que alaba”, era un hombre que vivía un estilo de vida de constante adoración.

2. El líder de alabanza que busca el Padre debe estar bajo autoridad. De los hijos de Asaf…bajo la dirección de Asaf, el cual profetizaba bajo las órdenes del rey. De los hijos de Jedutún:…seis, bajo la dirección de su padre Jedutún, el cual profetizaba con arpa, para aclamar y alabar a Jehová. De los hijos de Hemán:…Y todos estos estaban bajo la dirección de su padre en la música, en la casa de Jehová, con címbalos, salterios y arpas, para el ministerio del templo de Dios. Asaf, Jedutún y Hemán estaban por disposición del rey. (v.2-6)
Todo líder debe aprender a ejercer autoridad al funcionar primero bajo autoridad. Este principio es fundamental y es lo que determina si un líder de alabanza se convertirá o no en un verdadero “director”, para guiar a otros hacia el Trono de Dios.
Los líderes extraordinarios tienen una cosa en común: en algún momento aprendieron de sus directores, a los cuales se sujetaron en obediencia. No siempre fueron tiempos agradables, pero sin duda fueron indispensables en la formación de su carácter.
En este pasaje vemos claramente que todos ministraban como hijos, bajo la dirección de su padre. Todo líder de alabanza tiene la necesidad de funcionar bajo un padre espiritual, que lo instruya, lo discipule y lo forme. Es por eso que los grupos de adoración deben tener una visión multigeneracional e incluir a todas las edades y a todos los miembros de la familia.

3. El líder de alabanza que busca el Padre debe ser instruido. Y el número de ellos, con sus hermanos, instruidos en el canto para el Señor, todos los aptos, fue doscientos ochenta y ocho. (v.7)
Todo líder excelente sabe que la instrucción no es una opción. Sin la adecuada preparación fracasaremos, pues Dios no bendice nuestras intenciones, sino nuestras acciones. La fe sin obras esta muerta. Es claro que una instrucción total requiere madurez de parte de los instructores. Se requiere que estos no sólo sean buenos músicos o cantantes sino también padres en la fe. Donde no hay padres, hay rebelión, pues el enfoque está en las habilidades y no en el corazón. El ejemplo práctico, el hacer la obra juntos, es muy necesario para instruir a los hijos para enseñarles los aspectos prácticos del ministerio.
1 Cor 4:15-16: Porque aunque tengáis diez mil ayos en Cristo, no tendréis muchos padres; pues en Cristo Jesús yo os engendré por medio del evangelio. Por tanto, os ruego que me imitéis.

Escrito por Marco Barrientos.

viernes, 21 de noviembre de 2008

Adoración...

La adoración es algo grande. Esperamos adorar cada semana. Cuando la música incluye una de nuestras favoritas decimos: "La adoración estuvo excelente!".
Cuando la música no está muy buena nos quejamos y nos preguntamos porque no habrá estado tan buena la adoración.
Abandonamos las Iglesias por su "estilo de adoración". La adoración es algo grande.
¿Te has preguntado alguna vez si es que estamos más preocupados por lo que la adoración hará por nosotros y menos preocupados por el Objeto de nuestra adoración?
Parece ser que se trata mas de lo que obtenemos que de lo que damos.
Seria como llevar un regalo al cumpleaños de un amigo pero al final quedárnoslo.
La Adoración es basicamente DAR nuestras vidas (otra vez) a Dios.
La Adoración no son los sentimientos que experimentamos al cantar.
La Adoración no es convencer a Dios para que nos bendiga.
La Adoración no tiene que ver con que la guitarra este fuerte o no.
La Adoración no es lo que esta sucediendo en el escenario.
La Adoración no es entretenimiento, luces o sonido.
La Adoración no es para nada acerca nosotros. No es acerca de nosotros. Es acerca de El.
Y entramos por las puertas de la cruz. En la Cruz nos rendimos, amamos, lloramos, soñamos, entregamos, callamos, arrodillamos, confesamos. Miramos a Dios y lo colocamos sobre todas las cosas porque El es digno.
La vida se vuelve alocada y dolorosa nadie puede negar eso.
STRESS POR EL TRABAJO, DIVORCIOS, MUERTE, ADICCIONES, ENFERMEDAD, SOLEDAD.
Nadie te pide que pretendas que estas cosas no te están afectando. No pretendas; simplemente estás invitado a traer esas cosas a la cruz y a mirar a Jesús. Y conforme lo mires a El, dejar que tu respuesta sea adorar.
Jeremy Riddle

lunes, 17 de noviembre de 2008

Cara a cara...

"Cuando a Cristo se le preguntó por la más simple y pura definición de lo que Dios desea de nosotros, El respondió:
"Oye Israel. El Señor nuestro Dios es el único Señor… Ama al Señor tu Dios con todo tu corazón, con toda tu alma, con toda tu alma y con todas tus fuerzas".
Marcos 12:29-30
Esto es adoración: El uso de todo mi ser para expresar mi más profundo amor por otro. Sea que este expresando amor por mi esposa, mis niños o mi Señor, no he adorado en verdad hasta que haya involucrado todo mi ser, todo mi cuerpo – todo de todo – en una encarnación de mi profundo amor. Solo puedo conocer lo que significa adorar a Dios cuando mi corazón está apegado a su corazón. Cuando amo lo que él ama. Cuando pienso como él piensa. Cuando todo mi ser está totalmente fundido en el ser de Dios.
Dios no quiere mas cultos, nuevos métodos ni ideas creativas. Dios nos quiere a nosotros. Dios desea que sus hijos expresemos nuestro amor por él.
Este mandamiento sobrepasa a todos los demás.
Escucha cómo han sintetizado hombres piadosos lo que debe ser nuestra adoración, de acuerdo con lo que se ve en el versículo:

"Dios nos ha dado una mente para conocerlo, un corazón para amarlo, una voluntad para obedecerlo y un espíritu para adorarlo" John Benham

"La adoración es la respuesta del creyente en su totalidad – la mente, las emociones, la voluntad, y el cuerpo – a la totalidad de lo que Dios es, dice y hace" A.W.Tozer

"Adorar es avivar la conciencia mediante la santidad de Dios, alimentar la mente con la verdad de Dios, purgar la imaginación con la belleza de Dios, abrir el corazón al amor de Dios, dedicar la voluntad al propósito de Dios" William Temple

"Querido Padre:Quiero expresar mi más profunda gratitud por la manera tan desinteresada como te diste a ti mismo para que yo pudiera vivir.
Me amaste en grado sumo, antes, incluso, de que yo te conociera, aun cuando te estaba rechazando. ¡Gracias por tu amor!
Lléname de tu Espíritu para que se puedan abrir mis ojos. Dirígeme de nuevo a tu Palabra para que pueda andar en tu Presencia cada día, en íntima comunión contigo, cara a cara, aprender a expresar mi amor por ti con todo mi corazón, toda mi alma, toda mi mente y todas mis fuerzas.
En el nombre de Jesucristo, quien me dió acceso a tu Presencia. Amén"
Introducción del libro " Cara a cara" de Jaime Fernández Garrido.

miércoles, 12 de noviembre de 2008

Para meditar...

¿Qué es la adoración?
“La adoración es sentir en tu corazón y expresar de alguna manera apropiada un humilde pero deleitoso sentido de admiración, maravilloso asombro y sobrecogedor amor en la presencia del más antiguo misterio, esa majestad que los filósofos llaman la Causa Primera, por la cual nosotros clamamos Padre nuestro que estás en los cielos” - AW Tozer

“La adoración es la atribución amorosa de alabanza a Dios por lo que El es en sí mismo y en sus hechos providenciales. Es la inclinación de nuestro Espíritu interior ante El en profunda humildad y reverencia. Adorar es la contemplación de Dios conforme El se agradó en revelarse a sí mismo en su Hijo y en las escrituras.” -J Oswald Sanders

“La adoración es la respuesta total de honor de parte del hombre al único eterno Dios que sea ha revelado a sí mismo en el tiempo” -Evelyn Underhill

“La adoración es la confrontación complete al Dios de las escrituras que se revela a sí mismo dándonos amplia oportunidad de responder. La adoración es toda y cada respuesta digna a Dios.” -Donald Hustad

“La adoración es el disfrute de Dios en nosotros y nuestro disfrute de Él. La adoración es una respuesta a la relación Padre/Hijo”. -Graham Kendrick

“La Adoración es la contemplación en adoración de Dios”. Dr. R.A. Torrey

“Adoración es darle respeto y honor a Dios” - John MacArthur

“La adoración es un encuentro personal”. -Bob Mumford

“La adoración es una reunión personal con Dios en la que lo honramos, magnificamos y glorificamos por su persona y acciones”. -Robert Webber

“La adoración es celebración. Toda nuestra vida es un festival: estando persuadidos que Dios está presente en todo, en todas partes, le adoramos conforme pisamos la tierra, cantamos himnos conforme sembramos las semillas, y sentimos inspiración en todo lo que hacemos” -Clemente de Alejandria

“La adoración es el largo proceso de la vida de conocer y ser conocidos por Dios” - Anónimo

Nunca es tarde.. Tómese un tiempo, medite en estos pensamientos y empiece a adorar.. El lo oye constantemente...

lunes, 10 de noviembre de 2008

Alabanza es guerra...

Marcos Witt
Pablo dice en 2 Cor. 10.4 - ... por que las armas de nuestra milicia no son carnales, sino poderosas en Dios para destrucción de fortalezas...
Nuestra guerra no es carnal, así que nuestras armas tampoco lo son. La Biblia nos habla claramente acerca de que nuestra guerra es en contra de principados y potestades, gobernadores de las tinieblas de este siglo, contra huestes espirituales de maldad en las regiones celestes (léase Ef. 6.12-13).
Alabanza, adoración, oración, ayuno e intercesión utilizados en conjunto con la Palabra de Dios, la sangre del Cordero y el nombre de Jesús son nuestras armas con las que causaremos un extraordinario daño al terreno del enemigo. Al cantar, hablar o declarar alabanzas al Señor, estamos haciendo saber a las fuerzas contrarias las verdades que se encuentran en la Palabra. Estamos apuntando y bombardeando el reino de nuestro enemigo recordándole que Jesús YA triunfo sobre el, y que podemos gozarnos en Su triunfo.
...Majestuoso, Poderoso, Digno de loor... Jesucristo es Rey, Jesucristo es rey, postrados hoy ante Sus pies, Jesucristo es Rey...
Creo firmemente que cuando Satanás escucha esta declaración salir de la boca de cualquier creyente, el tiembla. Al decir... Jesucristo es Rey... estamos enviando un poderoso misil al reino de las tinieblas y libertando a los cautivos que están bajo su control. NO por el hecho de que el canto en si tenga el poder, pues el canto es solo el portador de lo que es más poderoso: la declaración de la Palabra de Dios.
Declaraciones como Jesús es el Señor, Jesucristo es el Vencedor, Jesucristo es Rey y otras más como estas, que causan danos terribles al reino de las tinieblas, por que son declaraciones poderosas y acertadas acerca de la realidad de la verdad: Jesús-Vencedor, Satanás-perdedor.

En la próxima reunión donde usted se encuentre alabando al Señor, trate de recordar este principio, para que su alabanza pueda tomar una nueva perspectiva y enfoque. Dígase a si mismo," al estar cantando y alabando, entregando mi corazón y mi vida al Senor, e estoy trayendo mas derrota al reino de Satanás.
Es por eso que la alabanza casi nunca es silenciosa. Cuando tenemos algo que festejar, alguien a quien presumir y una victoria que declarar, ¿por qué hacerlo en silencio?
Declaremos al mundo entero. Levantemos la voz y hagamos alarde del hecho que tenemos un gran Señor que... sometió TODAS las cosas bajo sus pies... (Ef. 1.22) y que nos ha regalado Su gran victoria.

viernes, 7 de noviembre de 2008

Vivir en su Presencia

Cuando llegué a casa de vuelta de mi reunión, hice tres sencillos compromisos con el Señor para el año siguiente. Esto es lo que iba a hacer:
-Levantarme a las cinco todos los días para leer la Biblia.
-Escribir una página entera en un diario espiritual.
-Aprender a orar y a buscarlo a Él, hasta que lo hallara.
Recuerdo todavía la primera línea de mi primer diario espiritual: “Amado Dios, no sé qué decirte”. Un día tras otro, miraba lo que había escrito. En cada página veía la verdadera razón de que mi agitada vida cristiana me dejara un sabor tan insípido en la boca: me había convertido en un experto en servir a Dios, pero de alguna forma me las había arreglado para seguir siendo un novato en cuanto a ser amigo suyo.
Pero seguí adelante. A mediados del segundo mes, las cosas comenzaron a cambiar. Era como si una grandiosa Presencia entrara a mi habitación en aquella hora temprana y se sentara cerca de mí. Las incoherentes anotaciones del diario se convirtieron poco a poco en confesiones personales para Aquél que me escuchaba. Su pasión por mí, sus propósitos con mi vida no sólo con la idea de mi vida, sino con aquel día, aquella hora y aquel minuto en particular comenzaron a brotar de las páginas de mi Biblia.
Eso sucedió hace más de quince años. Los placeres del permanecer y sus extraordinarios beneficios han definido de nuevo el alcance y el impacto de la obra de Dios a través de mí. Veo fruto dondequiera que me vuelvo.
Sin embargo, ni una sola uva es producto de que yo haya trabajado más duro. Le aseguro que no poseo ningún conocimiento especial en estas cuestiones; hay generaciones de discípulos maduros que han ido por delante de mí en este camino. No obstante, que yo sepa, la gran mayoría de los hijos de Dios viven hoy ignorantes de la promesa y la práctica de este permanecer. Como consecuencia, no alcanzan el nivel de “mucho fruto” representado por el cuarto canasto desbordante.
Tal vez usted se encuentre dentro de esa mayoría. No está seguro de cómo se produce en realidad una experiencia espiritual desbordante. Y quizá se pregunte: “¿Cómo es posible que con sólo permanecer baste para subir a los niveles más altos de fecundidad?” Oro para que en las próximas páginas usted encuentre las respuestas.
La persona con la que se permanece.
Este permanecer se relaciona con la amistad más importante de nuestra vida. No mide lo mucho que usted sepa sobre su fe o su Biblia. Al permanecer, usted busca, escudriña, siente sed, espera, ve, conoce, ama, oye y reacciona ante... una persona.
Permanecer más significa más de Dios en su vida; más de Él en sus actividades, pensamientos y anhelos. En nuestra agitación al estilo occidental por hacer y rendir para Dios, muchas veces fallamos en la tarea de limitarnos a disfrutar de su compañía. No obstante, fuimos creados para sentirnos insatisfechos e incompletos cuando tenemos menos que esto.
En palabras del salmista: “Como el ciervo brama por las corrientes de las aguas, así clama por ti, oh Dios, el alma mía” (Salmo 42:1). Si sentimos una necesidad tan profunda y constante de esta relación, ¿por qué tan pocos de nosotros la buscan fervientemente? Estoy convencido de que una de las razones principales es que en realidad no creemos que le agrademos a Dios.
Por supuesto, creemos que Él nos ama, en un sentido teológico (”Dios ama a todo el mundo, ¿no es cierto?”), pero no sentimos que le agrademos de manera particular. Estamos convencidos de que recuerda todas las cosas malas que hemos hecho en el pasado, y juzga enseguida lo que estamos haciendo ahora. Damos por sentado que es impaciente, que está ocupado con cosas más importantes, y que se resiste a pasar tiempo con nosotros. ¿Qué ganas va a tener nadie de pasar tiempo con una persona que se siente así con uno? Si usted fuera a hacer una lista de las cualidades de su mejor amigo, supongo que va a anotar cosas como “Me acepta”, “Siempre tiene tiempo para mí”, y “Siempre salgo de su presencia animado”. Lo que usted valora en su mejor amigo es precisamente lo que Dios le ofrece. Él es digno de confianza y paciente. Cuando lo mira a usted, no trae a la mente los pecados que usted le ha pedido que le perdone. Sólo ve a un hijo amado; a un digno heredero. Y este Dios —su Amigo— quiere permanecer con usted más de lo que usted quiere permanecer con Él.
Jesús dijo: “Como el Padre me ha amado, así también yo os he amado; permaneced en mi amor” (Juan 15:9). ¿Captó esto? ¡Permaneced, deleitaos, hallar el amor verdadero “en mi amor”!
Si habitáramos de verdad en su amor, saldríamos de allí sintiéndonos tan fortalecidos, tan amados, tan aceptados, que nos apresuraríamos a volver a Él cada vez que nos fuera posible.

martes, 4 de noviembre de 2008

Respirar

Inhalamos y exhalamos unas 26.000 veces por día y algunos expertos sostienen que el 99% de nuestra energía proviene de nuestra respiración. Se sabe que el proceso respiratorio debería comenzar en el estómago, pero la agitación, el estrés y el no ser concientes de este proceso hacen que la mayoría de nosotros tome aire con el pecho en lugar de utilizar el diafragma. Me gusta mucho el devocional del día de hoy del libro “Encuentros Al Limite”:
Génesis 2:7: Entonces Jehová Dios formó al hombre del polvo de la tierra, sopló en su nariz aliento de vida y fue el hombre un ser viviente (RVR60).
Cuando Moisés se encontró en la zarza con Dios y le preguntó su nombre, Dios le dijo: «Yo soy el que soy» o más precisamente «YHWH» (Éxodo 3:14 y 15) Pero ¿Qué clase de nombre es ese? ¿Qué quiso decir Dios? En el hebreo original la palabra que allí aparece en los manuscritos más antiguos es YHWH. Intentemos pronunciar eso. Imposible. A esa palabra se la ha traducido como Jehová, Yahvé y Señor según la versión de la Biblia que se utilice.
El «Yo soy» tiene que ver con que se cree que la palabra YHVH proviene del verbo hayah, que se relaciona con el vocablo ser. Pero también se sabe que los hebreos antiguos tenían miedo de pronunciarlo. El nombre YHVH era tan sublime y tan digno de reverencia que tenía sentido el hecho de que fuera impronunciable.
Los hebreos creían que este nombre era el sonido de la respiración. YHVH sonaba algo así como: Yod – he – vav - he. ¿Será el nombre de Dios el sonido de la respiración? ¿Será que al respirar la creación repite una y otra vez el nombre del Señor? Jesús también dijo: Yo soy la vida (Juan 11:25) y curiosamente no hay vida sin respiración.
Cuando un bebé nace, lo primero que debe hacer es respirar y hasta era costumbre darle una palmadita para que lo hiciera de manera urgente. ¿Y cuándo muere el ser humano? Cuando da su último respiro. Yo me pregunto ¿Será que Dios estaba jugando con su nombre? Porque otra manera de decir lo que acabamos decir es que la primera palabra que debe pronunciar el ser humano para vivir es YHVH y cuando ya es incapaz de decirla, muere.
Al límite: Piensa en Romanos 8:11 Y si el Espíritu de aquel que levantó a Jesús de entre los muertos vive en ustedes, el mismo que levantó a Cristo de entre los muertos también dará vida a sus cuerpos mortales por medio de su Espíritu, que vive en ustedes.
Encuentro: Eres mi respirar. Mi aliento de vida. Tu nombre es misterio; tu vida, la mía. Eres Jehová de los ejércitos, mi Señor y mi Rey, renueva hoy mis pulmones en ti.

jueves, 30 de octubre de 2008

Adoradores insaciables

Matt Redman

Como adoradores de Jesucristo vivimos en la tensión entre lo actual y lo que aun no es. A partir del día en que lo recibimos, nuestras almas hallaron su destino y razón de ser.
La realidad de su amor y su presencia invadió nuestros corazones, y hallamos la plenitud. La Biblia revela que Dios es el que "sacia de bien tu (nuestra) boca" (Salmos 103:5). Pero ese no es el cuadro completo. También somos adoradores insaciables, personas que solo vemos en parte. Siempre llevaremos en nuestros corazones una santa frustración: El gemido interno de todos los creyentes que esperamos con entusiasmo "la adopción, la redención de nuestro cuerpo" (Romanos 8:23).
Eugene Peterson escribió: "La adoración no satisface nuestro hambre por Dios, sino que despierta nuestro apetito". Cuanto más vemos de Jesús, más sabemos que aun hay más por descubrir. Cuanto más toca nuestras vidas, más nos damos cuenta de cuán fervorosamente necesitamos que Él consuma cada parte de nosotros. La adoración también origina tanto preguntas como respuestas. Cada vislumbre que tenemos de Jesús, así tan maravillosa como es, es sólo una gota en el océano. Y cuanto más vislumbres tengamos, más comenzaremos a descubrir cuán inmenso es el océano. Somos personas que "buscamos descubrir más de Él", corazones que lo adoramos en un viaje difícil pero gratificante. Un día alcanzaremos nuestro destino final; pero por ahora, cada paso de nuestro caminar con Dios es un pequeño anticipo de la gloriosa herencia que tenemos por delante.
Muchas veces es muy alentador ver cuánto hemos avanzado en nuestro camino. En un muelle, las personas marcan las filigranas como recordatorios de los niveles alcanzados por la marea en ese lugar. De la misma manera, es muy bueno reflexionar en las cimas y depresiones que tuvimos en nuestro andar. Cuando miro hacia atrás, comienzo a ver las marcas de la gracia de Dios durante toda mi vida. Cuanto más lejos miro, más veo cuánto Él ha formado y sanado mi corazón.
Hay otra razón por la que probablemente permanecemos como adoradores insaciables en esta vida. Comenzamos a ver al mundo a través de los ojos del cielo. Cuanto más vemos la perfección de Dios, más notamos la imperfección que nos rodea. Los verdaderos adoradores se mueven con cuidado, toman conciencia de cómo está el mundo en el que viven y desean marcar una diferencia dentro de la injusticia, la pobreza y el dolor que los rodean. Un adorador de Jesús no puede hacer la vista gorda a todas esas cosas.
Hay una santa y a veces dolorosa frustración que se introduce justo en el corazón del adorador insaciable. Todo nuestro ser sabe que "las cosas no pueden seguir en este rumbo". Debemos ser intercesores, personas que vean la brecha y se pongan allí. Dios nos impartió su corazón de restauración y un ardiente deseo por ver su amor y su justicia sanando las naciones. Pero si realmente vamos a tener integridad en nuestra adoración, en algún momento este deseo deberá transformarse en acción: compartir nuestra comida con el hambriento, vestir al desnudo y satisfacer las necesidades de los afligidos (ver Isaías 58:7, 10). No podemos ser adoradores que simplemente se la pasan caminando por allí, ignorando la realidad de este mundo quebrantado. Dios desea llevarnos al lugar en el que podamos unirnos a su corazón que se duele por los demás, un lugar donde el hacerlo todo ya no sea simplemente una opción más.
Anhelo ser un adorador que sea un ejemplo a seguir por los demás, no sólo con mis labios, sino con mi vida. Dios dejó muy claro que la adoración y la justicia son inseparables.
Para que éstas vayan siempre juntas, hay tres cuestiones no resueltas dentro del corazón de los adoradores insaciables. Primero, sólo hemos vislumbrado la gloria de Dios, unas pocas gotas del océano de su esplendor. Vivimos con una constante sed, deseando más de Él en nuestras vidas. Segundo, vivimos sabiendo que somos personas quebrantadas, sanadas en parte pero aún muy frágiles. Somos adoradores "inconclusos", que anhelamos que su obra en nosotros sea concluida. Por último, estamos como peregrinos en una tierra extranjera, dolorosamente conscientes de los problemas que nos rodean y los muchos corazones que aun no han descubierto a Jesús. Mirando a través de los "lentes" del cielo, nuestros corazones se duelen por introducir al Reino de Dios en esas situaciones.
Estas tres cuestiones no nos hacen peores adoradores. En cambio, moldean nuestra devoción y fortalecen nuestra resolución de perseverar en la fe. Solo vemos en parte, aunque lo que vemos es suficiente como para brindarnos esperanza y propósito en nuestro andar. Y mientras emprendemos nuestra adoración aquí y ahora, miramos hacia el horizonte, confiando que un día lo imperfecto desaparecerá y conoceremos como fuimos conocidos.

viernes, 24 de octubre de 2008

El corazón de la adoración

Rick Warren

La palabra rendición es poco popular, es tan fea como la palabra sumisión. Implica derrota, y nadie quiere ser un perdedor... Casi siempre se usa en un contexto negativo...Pero la entrega a Dios es el corazón de la adoración. Es la respuesta natural al asombroso amor y misericordia de Dios. Nos entregamos a él, no por temor u obligación, sino por amor, “porque él nos amó primero” (1 Juan 4:9, 10, 19).

Ofrecerte a Dios es la esencia de la adoración [Romanos 12:1-2].

A este acto de entrega personal se le llama de diversas maneras: consagración, que Jesús sea el Señor de nuestra vida, tomar la cruz, morir al yo, ponerse en manos del Espíritu. Lo que importa es lo que se haga, no cómo se le llame. Dios quiere nuestra vida: toda nuestra vida. El noventa y cinco por ciento no es suficiente.

Hay tres obstáculos que bloquean nuestra entrega total a Dios. El temor, el orgullo y la confusión. No nos damos cuenta de cuánto nos ama Dios, queremos controlar nuestra propia vida y malinterpretamos lo que significa la entrega.

¿Puedo confiar en Dios?

El temor y la desconfianza impiden entregarnos, pero el amor echa fuera el temor. Cuanto más nos damos cuenta de lo mucho que Dios nos ama, más fácil nos resultará la entrega...

“Reconozcamos nuestras limitaciones”

... Nuestro orgullo. No queremos admitir que somos meras criaturas y que no podemos controlar todo....Cuando nos enfrentamos a nuestras propias limitaciones, reaccionamos con irritación, enojo y resentimiento...

“Lo que significa rendirse”

En lugar de reducirla, la entrega potencia nuestra personalidad. C.S. Lewis señaló: “Cuanto más dejamos que Dios tome nuestra vida, más verdaderamente nos convertimos en lo que somos, porque El nos creó”...

La entrega se demuestra mejor con la obediencia y la confianza... Abraham siguió la guía de Dios sin saber adónde lo llevaría. Ana esperó el tiempo perfecto de Dios sin saber cuándo sería. María esperó un milagro sin saber cómo. José confió en el propósito de Dios sin saber por qué las circunstancias se dieron como se dieron. Todos ellos se entregaron a Dios por completo.

Puedes saber que te has entregado a Dios cuando dependes de él para que las cosas resulten bien, en lugar de manipular a los demás, imponer tus ideas y controlar la situación. Uno suelta las riendas y deja que Dios obre. No necesitas estar “siempre al control”. La Biblia dice que debemos entregarnos al Señor y esperar en él con paciencia (Sal. 37:7a, paráfrasis). En lugar de esforzarte más, confía más. También sabes que te has rendido cuando no reaccionas a la crítica ni te apresuras a defenderte. Un corazón rendido se destaca en las relaciones personales. Una vez que nos entregamos a Dios, ya no descalificamos a los demás, no exigimos nuestros derechos y no buscamos nuestro propio bien.

Las bendiciones de rendirnos. Son paz y libertad.

Entregarse no es la mejor manera de vivir, es la única manera de vivir... Llegó el momento para que te rindas a Dios, a su gracia, a su amor y a su sabiduría.

domingo, 19 de octubre de 2008

Tu fe mueve montañas.. Atrévete a creer !!

Todo es posible, si puedes creer..

jueves, 16 de octubre de 2008

Limpiando el Templo de Dios

Escrito por Victor Hugo Barahona

2º Crónicas 29

Esta sección habla del Rey Ezequias, el rey Ezequias a diferencia de sus antepasados quería vivir de una manera correcta delante de Dios, la Biblia menciona que el quería hacer un pacto con Jehová, como se dijo anteriormente sus padres vivieron de manera desordenada e hicieron altares a otros dioses dentro del Templo de Jehová, es por eso que Ezequias comenzó a hacer la limpieza del templo, por eso convocó a los sacerdotes y a sus familiares para poder realizar esta labor; a los 8 días de comenzar la labor las puertas del templo ya estaban limpias y toda la inmundicia se encontraba en el patio, me imagino que la gente cuando pasaba por el pórtico del templo se habrá dicho que el trabajo estaba ya terminado porque veía todo limpio, pero no era así, solo lo externo estaba limpio mas no lo interno. Así a veces somos nosotros en nuestra vida espiritual, nos preocupamos mas de lo externo que de lo interno, lo que la gente ve, aparentemente todo esta bien pero a veces no llevamos una vida de verdadera comunión con Dios.
La Biblia dice que Dios busca verdaderos adoradores que lo adoren en Espíritu y verdad, porque Dios ve nuestro corazón, es importante estar limpios externamente pero es aun mucho mas importante estar limpios internamente porque eso es lo que realmente le interesa a Dios, es por eso que nosotros no debemos de permitir que la basura se acumule dentro de nuestra vidas así como pasó con el templo en el tiempo de Ezequias sino mas bien nosotros todos los días debemos renovar nuestra comunión con Dios para que así sea mas fácil sacar las cosas que no se encuentra conforme a la voluntad de Dios.
Volviendo a la historia la Biblia menciona que después de limpiar el pórtico los sacerdotes entraron al interior del templo, suena a redundancia verdad? dice que entraron al interior, lo que pasa es que querían limpiar hasta lo mas profundo del templo, así también debe ser en nuestra vida espiritual debemos dejar de que Dios limpie todo nuestro ser, no dejar nada oculto a Dios, Dios desea de nosotros el 100%, no el 50%, no el 80% no el 90%, ni el 99.9% el desea todo de nosotros, a Dios no se le puede ocultar nada, El está esperando que nosotros nos rindamos a El para que pueda actuar en nuestras vidas, así como ministros de Dios que somos nosotros debemos rendir nuestra vida a El por completo, no olvidar de que todo lo que hacemos lo hacemos para Dios y no para los hombres, sea que estemos ministrando las alabanzas, tocando un instrumento, poniendo las filminas o limpiando los cables, etc., todo lo que hacemos así sea algo insignificante para los hombres debemos recordar que para Dios tiene importancia, nuestro afán de servicio debe ser solo para Dios, nuestro culto y adoración sea solo para El.

Dios los bendiga a todos.

miércoles, 15 de octubre de 2008

Ritmos mundanos y letra cristiana

Marco Barrientos

Al viajar por diferentes partes de nuestro continente, muchas veces la gente me hace la siguiente pregunta: ¿No será la música cristiana contemporánea una concesión entre ritmos mundanos y letra cristiana?
Y la respuesta es: Definitivamente no, ya que la música cristiana contemporánea es una expresión del corazón de hombres y mujeres que han sido tocados por el amor de Dios y que le muestran su gratitud a través de sus canciones. Ellos comparten su mensaje usando el don que Dios les dió y el lenguaje con el que se expresan mejor: la música.
Ciertamente existe una controversia en cuanto a los ritmos y estilos musicales contemporáneos. ¿Son aceptables en la música cristiana? ¿Se vale usar salsa, rock, merengue, rap, etc para transmitir un mensaje cristiano? Para contestar esta pregunta sin prejuicios, debemos hacer a un lado nuestras preferencias o gustos personales como el criterio que determina si un estilo o ritmo es o no "de Dios", y enfocarnos en dos consideraciones que son realmente importantes: La Cultura de los jóvenes y El Balance de la Música.

1. La Cultura se puede definir como el conjunto de costumbres y hábitos que un grupo de personas practica. Los antropólogos nos dicen que el lenguaje es el elemento más importante de una cultura. Y la música es el lenguaje más poderoso que usan los jóvenes, pues trasciende aun las barreras nacionales y de idioma. Así como cada cultura o grupo étnico tiene su propio lenguaje, y este evoluciona con el tiempo, la música cristiana contemporánea es una de las expresiones de la cultura del joven cristiano de hoy. Y es necesaria porque presenta el poderoso mensaje del Evangelio en un lenguaje relevante, actual, pero sobre todo accesible para los jóvenes. En otras palabras: "les habla en su propio idioma".
Ahora bien, debemos reconocer que no todos los elementos de una cultura son buenos. Por eso, cuando rendimos nuestra vida a Jesucristo, debemos adecuar nuestra "cultura" (hábitos) para alinearla con la Cultura del Reino de Dios (Mateo 5 al 7), y cambiar hábitos y corregir costumbres para que nuestro andar sea agradable a Dios. Obviamente, esto incluye la música que escuchas. Si quieres agradar a Dios, ya no escucharás música que exalta al diablo y su mensaje de rebeldía, perversión y ocultismo. Definitivamente hay música diabólica, pero eso lo determina la letra de las canciones, y el espíritu que hay detrás de ellas, y no los ritmos que usa. Hay baladas con música de violines que promueve un espíritu perverso de sensualidad; y hay canciones que usan ritmos muy intensos, y sin embargo están llenas del poder de Dios.

2. El Balance tiene que ver con la estructura de la música. Déjenme explicarlo: la música se compone de tres elementos principales que son melodía, armonía y ritmo. Estos deben funcionar en un balance que se manifiesta de la siguiente manera: La melodía debe dominar, ascendiendo y descendiendo en la escala musical; la armonía debe apoyar a la melodía, alternando acordes mayores y menores; y el ritmo debe proveer una base para la melodía y la armonía al combinar la repetición y la variación en sus patrones. Cuando los tres elementos de la música funcionan en un balance, el efecto que esta tiene sobre los oyentes es muy positivo, al grado de que estudios científicos realizados con animales han demostrado que la música balanceada hace que las gallinas pongan más huevos y que las vacas den más leche!Es verdad que algunas de las expresiones de la música cristiana contemporánea están desbalanceadas pues existe un predominio de la base rítmica sobre la melodía y armonía. Esto puede producir algunos efectos negativos, como ansiedad y tensión, pero eso de ninguna manera significa que esa música sea "del Diablo". Tomar demasiado refresco de cola puede ser muy perjudicial, pero eso no significa que tu marca favorita sea "del Diablo". (aunque es probable que algunos así lo crean también). Todo es cuestión de balancear tu dieta, tanto en lo que comes, como en lo que escuchas.Lo que realmente es importante es evaluar cuál es la influencia espiritual que hay detrás de la música, o en otras palabras, cuál es el "espíritu" que impulsa al compositor y ejecutante. La Biblia dice: "De la abundancia del corazón habla la boca". También declara: "Un arbol bueno no puede dar fruto malo y una arbol malo no puede dar fruto bueno" y "De una misma fuente no pueden brotar agua dulce y amarga". Si el compositor y ejecutante de la música que escuchas esta consagrado a Dios (sólo observa su estilo de vida y su mensaje), su música será un vehículo a través del cual el Espíritu Santo bendecirá tu vida. Pero si está consagrado a un espíritu de tinieblas (nuevamente, sólo observa su vida) esa influencia penetrará tu vida a través de la música, y tarde o temprano te dominará a ti también.

domingo, 5 de octubre de 2008

Conocer a Dios

Fuimos creados para conocer a Dios. La meta más importante de nuestras vidas es conocer a Dios. Lo mejor que existe en la vida, lo que ofrece mayor gozo, mayor delicia y bienestar que ninguna otra cosa es: el conocimiento de Dios.
Como un arroyo busca el mar, como un pájaro busca su libertad, como un niño busca a su padre, como la amada de Cantar de los Cantares buscaba a su amado, así los hombres buscan a su creador, aún sin saberlo.
Existe en el fondo de cada corazón una nostalgia, un vago recuerdo, y una inquietante búsqueda que sólo es satisfecha cuando la criatura se reencuentra con su creador.
La búsqueda de Dios ha llevado a los hombres a recorrer los más insólitos caminos, la mayoría de ellos con frustrantes resultados, hasta que el mismo Dios se hizo hombre mostrando el verdadero camino para alcanzar su deseo más profundo.
"Te ruego que me muestres tu gloria", dijo Moisés- "Quién me diera el saber dónde hallar a Dios. Yo iría hasta su silla", rogó Job.- "Con mi alma te he deseado en la noche, y en tanto me dure el espíritu dentro de mí, madrugaré a buscarte", clamó Isaías.- "Mi alma tiene sed del Dios vivo", "Anhela mi alma y aún ardientemente desea los atrios de Jehová", deseaba David.Nosotros mismos caminamos por años alejados de Dios y podemos recordar ese vacío que nada podía llenar. Esas preguntas que nadie podía responder, esos miedos y esa soledad que nos asaltaba sin explicación. Hasta que descubrimos a la persona de Dios, y nuestra alma encontró reposo. "Prueben, y vean que el Señor es bueno", declara el Salmo 34.
El mismo Dios se está ofreciendo para ser conocido, porque su mayor deseo es darse a conocer por sus hijos. Y nos seduce declarando: "Los que miran al Señor quedan radiantes de alegría y jamás se verán defraudados". Qué significa conocer a DiosLa Biblia ilustra con figuras y analogías a Dios y a los hombres del modo en que el hijo conoce al Padre, en que la mujer conoce a su esposo, en que el súbdito conoce a su rey, y en que las ovejas conocer a su pastor. Pero todas tienen en común una relación directa y personal entre dos personas.
1. El conocer a Dios es una relación personal con él. No es cuestión del conocimiento de los eruditos bíblicos, sino de cuestión de tratar con él a medida que él se abre a nosotros.
2. Es cuestión de compromiso personal. De la misma manera que para llegar a conocer a una persona hay que aceptar plenamente su compañía, compartir sus intereses e identificarse con sus asuntos. No podemos saber cómo es una persona hasta que hayamos "gustado" o probado su amistad.
3. El conocer a Dios es una relación que involucra tanto lo intelectual, como lo emocional y la voluntad. Es necesario estar involucrado emocionalmente en las victorias de Dios en el mundo. Es necesario que nos regocijemos cuando Dios es honrado y nos duela cuando vemos que la persona de Dios es avergonzada.
4. El conocer a Dios es cuestión de gracia. La iniciativa parte invariablemente de DIos. No es que nosotros nos hagamos amigos de DIos. Es Dios que se hace amigo de nosotros."Conocer" indica que Dios tomó la iniciativa de amar, elegir, redimir, llamar y cuidar."Mas Jehová dijo a Moisés: ... has hallado gracia en mis ojos, y te he conocido por tu nombre" (Exodo 33:17)Lo que interesa por sobre todo no es el que yo conozca a Dios, sino el hecho de que él me conoce a mí. Estoy esculpido en las palmas de sus manos. Estoy siempre presente en su mente. Yo lo conozco a él porque él me conoció primero. Me conoce como amigo, como uno que me ama; y no hay momento en que su mirada no esté sobre míUna vez que comprendemos que el propósito principal para el cual estamos en este mundo es el de conocer a Dios, la mayoría de los problemas de la vida encuentran solución por sí solos."Así dijo Jehová: No se alabe el sabio en su sabiduría, ni en su valentía se alabe el valiente, ni el rico se alabe en sus riquezas. 24Mas alábese en esto el que se hubiere de alabar: en entenderme y conocerme, que yo soy Jehová, que hago misericordia, juicio y justicia en la tierra; porque estas cosas quiero, dice Jehová" (Jeremías 9:23)
Cuidado con confundirnos-Se puede conocer mucho acerca de Dios sin tener un conocimiento personal de El. Podemos leer muchos libros de teología y apologética. Podemos aprender a manejar las Escrituras, y hablar bien sobre temas cristianos pero puede ocurrir que no conozcamos a Dios en absoluto.-
Se puede ser muy religiosos y no conocer a Dios. Uno puede escuchar muchos sermones, saber cómo actuar como creyentes, cómo leer la Biblia, como orar, como ganar a otros para Cristo, como cumplir con todos los como el joven rico que se encontró con Jesús. Incluso alcanzar una función importante, y conocer muy poco a Dios.Daniel: Modelo de alguien que conoce a Dios
1. Quienes conocen a Dios son apasionados por Dios: "Mas el pueblo que conoce a su Dios se esforzará y actuará (Daniel 11:32) Los que conocen a Dios, mientras su Dios está siendo desafiado o desoído no pueden descansar, sienten que tienen que hacer algo; la deshonra que se está haciendo al nombre de Dios los impulsa a la acción. Cuando Nabucodonosor prohibió la práctica de la oración, Daniel lo hacía frente a una ventana abierta para que todos pudieran ver lo que estaba haciendo.Los hombres que conocen a Dios son antes que nada hombres de oración. Su celo y su energía por la gloria de Dios se ponen de manifiesto en sus oraciones. En el capítulo 9 lo vemos a Daniel orando con tanta pasión y agonía de espíritu como muy pocas veces se ha visto. Cuanto mayor es el conocimiento de Dios mayor es la pasión puesta en la oración. - ¿Cómo oramos ante la injusticia y la idolatría que vemos a nuestro alrededor?
2. Quienes conocen a Dios piensan cosas grandes de Dios: Quizás no existe en toda la Biblia una declaración más clara de la soberanía de Dios sobre los hombres."Sea bendito el nombre de Dios de siglos en siglos, porque suyos son el poder y la sabiduría. 21El muda los tiempos y las edades; quita reyes, y pone reyes; da la sabiduría a los sabios, y la ciencia a los entendidos. 22El revela lo profundo y lo escondido; conoce lo que está en tinieblas, y con él mora la luz" (Daniel 2:20)."Ahora, Señor, Dios grande, digno de ser temido, que guardas el pacto y la misericordia con los que te aman y guardan tus mandamientos;...7Tuya es, Señor, la justicia, ...9De Jehová nuestro Dios es el tener misericordia y el perdonar... justo es Jehová nuestro Dios en todas sus obras que ha hecho" (Daniel 9:4,7,9,14)Frente al poder del imperio de Babilonia, Daniel declara que el Dios de Israel es Rey de reyes y Señor de señores, que "el cielo gobierna". Que la mano de Dios está en la historia en todo momento, que la historia no es más que SU historia, o sea el desarrollo de su plan eterno. Estos eran los pensamientos acerca de Dios que llenaban la mente de Daniel¿Es esta la perspectiva de Dios que se expresa en nuestras oraciones?
3. Quienes conocen a Dios tienen gran valentía por Dios: Daniel y sus amigos eran hombres que no escondían la cabeza. Sabían lo que hacían. Habían calculado el costo. Tenían conciencia de lo que les podría ocurrir si Dios no intervenía, pero eso no los detenía. Una vez que estuvieron convencidos de que su posición era la correcta, con una sonrisa en su rostro se lavaron las manos de las consecuencias. "Es necesario obedecer a Dios antes que a los hombres", dijeron los apóstoles."Ni estimo preciosa mi vida para mí mismo, con tal que acabe la carrera con gozo", dijo Pablo.Estaban seguros de lo que a ellos les correspondía hacer, y esto les bastaba. ¿Estamos dispuestos a enfrentar cualquier oposición por declarar nuestra fe firme en Dios?
4. Quienes conocen a Dios manifiestan gozo en Dios: No hay paz como la paz de aquellos que tienen la total seguridad de que han conocido a Dios y que son amados por Dios. Esta relación les garantiza el favor de Dios durante toda la vida, a través de la muerte y por toda la eternidad. Esta era la paz y la serenidad que conocían Daniel y sus amigos.¿Y que Dios será aquél que os libre del mal", preguntó Nabucodonosor "He aquí nuestro Dios a quien servimos puede librarnos del horno de fuego ardiendo; y de tu mano, oh rey, nos librará. 18Y si no, sepas, oh rey, que no serviremos a tus dioses" (Daniel 3: 16) No había diferencia. Sea que viviesen o que muriesen, estarían contentos"La medida de nuestro gozo es otro elemento para saber si realmente conocemos a Dios¿Mantenemos nuestro gozo y nuestra paz frente a las adversidades?
5. Quienes conocen a Dios aman: La oración de Daniel por su pueblo, su identificación con el pecado de Israel y su clamor para pedir el perdón y la misericordia de Dios, hablan de su amor hacia sus hermanos.Dijo Juan "En esto sabemos que nosotros lo conocemos, si guardamos sus mandamientos. 4El que dice: «Yo lo conozco», pero no guarda sus mandamientos, el tal es mentiroso y la verdad no está en él. 5Pero el que guarda su palabra, en ese verdaderamente el amor de Dios se ha perfeccionado; por esto sabemos que estamos en él.
6El que dice que permanece en él, debe andar como él anduvo. (1 Juan 2:3)Cómo podemos conocer a Dios
1) Buscando su presencia en oración
2) Conociendo su voluntad por la Palabra
3) Obedeciendo sus mandamientos y creyendo en sus promesas

La alabanza a Dios en medio del dolor

Por Charles Stanley
Alabar a Dios es fácil cuando la vida es maravillosa. ¿Pero sabía usted que Él quiere que le demos gracias en todo, incluso en las circunstancias más difíciles?
Es fácil dar gracias cuando la vida está llena de bendiciones, como cuando recibimos un ascenso en el trabajo, intercambiamos votos matrimoniales, encontramos la casa de nuestros sueños, o tenemos nuestro primer hijo. Durante estos períodos de gozo, nuestra línea de comunicación con Dios puede rebosar de alabanza y acción de gracias. Pero, ¿qué sucede cuando vienen sufrimientos a la vida, cuando perdemos nuestro empleo, sufrimos la muerte de un ser querido, o recibimos un diagnóstico médico traumatizante y ominoso? ¿Cómo reaccionamos en esos momentos inciertos, incluso trágicos, de nuestra vida?
Si alguien supo de tragedias, padecimientos y privaciones, ése fue el apóstol Pablo. Pero, a pesar de sus sufrimientos, mantuvo a Dios en primer plano: "Estad siempre gozosos. Orad sin cesar. Dad gracias en todo, porque esta es la voluntad de Dios para con vosotros en Cristo Jesús" (1 Ts. 5:16-18). Santiago dice, además: "Hermanos míos, tened por sumo gozo cuando os halléis en diversas pruebas, sabiendo que la prueba de vuestra fe produce paciencia" (Stg. 1:2, 3). Para la mayoría de nosotros, ésta es una tarea muy difícil, e incluso absurda. ¿Cómo podemos dar gracias a Dios en medio de las situaciones amargas y angustiosas que soportamos? Un ejemplo de gratitud en medio de circunstancias horribles, es el de Gracia Burnham. Rehén de terroristas musulmanes por más de un año, y obligada a ver morir a su marido, Burnham experimentó el máximo dolor físico y emocional. Cuando volvió a los Estados Unidos, Gracia enfrentó todo tipo de preguntas. Dijo que una de las más frecuentes era: "¿Se ha hecho usted alguna vez la pregunta 'Por qué a mi, Señor?'" A esa pregunta, ella responde: ¿Saben una cosa? Yo tengo ese pensamiento todo el tiempo. Pero es: "¿Por qué me elegiste a mí para que naciera en los Estados Unidos, donde oigo de ti, donde tengo una familia que me ama, donde tenemos abundancia de comida, donde puedo elegir una carrera? ¿Por qué tengo unos hijos hermosos y saludables? ¿Por qué tengo un lugar donde vivir, cuando hay personas en otras partes que viven en casas de cartón? Si escribo las cosas malas que me han sucedido en la vida, son muy, muy pocas. Una de ellas duró bastante tiempo. Pero cuando escribo las cosas buenas que el Señor me ha dado, ¡Dios mío! Son innumerables. Uno puede llenar páginas y páginas. Eso es lo que les digo a las personas. "¿Por qué a mí, Señor? ¿Por qué me has bendecido tanto?" Piense en las circunstancias difíciles de su vida. Independientemente de que se parezcan o no a la situación de Burnham, ¿de qué manera puede ver lo bueno en todo lo que le sucede? ¿De qué manera puede dar gracias a Dios por sus dificultades, como también por sus bendiciones?
Recuerde: Dios tiene un plan perfecto para su vida. Los reveses temporales no deben jamás destruir nuestra confianza de que Él será suficiente. Aun en las situaciones más terribles, todos tenemos algo por lo cual estar agradecidos: nuestros hijos, la familia, el trabajo, o una almohada donde recostar la cabeza. Y siempre podemos dar gracias a Cristo por el sacrificio que Él hizo por nosotros.
La vida misma es un regalo de Dios. Es importante que, al igual que Gracia Burnham, enfrentemos y sobrellevemos los retos que Dios pone delante de nosotros. Cuando buscamos una salida rápida, nos privamos de lo que Dios quiere hacer en nuestras vidas. Además, privamos a los demás de un ejemplo de aliento y esperanza. A medida que se acercan las fiestas de fin de año, con el Día de Acción Gracias ya sobre nosotros, dejemos que nuestra luz ilumine a los demás por medio de nuestra alabanza a Dios en todas las circunstancias. Es fácil darle gracias por la familia y una mesa llena de comida, pero recuerde, conforme este año llega gradualmente a su fin y comienza uno nuevo, tener siempre presente en su mente la alabanza a Dios.
¿Significa esto que hay que estar gritando hacia el cielo todo el día? Claro que no. El salmo 92 da un modelo de alabanza cuando dice que debemos "anunciar por la mañana [Su] misericordia [de Dios] y [Su] fidelidad cada noche" (v. 2). Comience cada día con alabanzas a Dios, y llene después cada momento del mismo con mayor sumisión a Su voluntad. Esmérese en este Día a dar gracias a Dios por Su gracia y provisión. Usted descubrirá pronto que Él le guiará en medio de las circunstancias más difíciles de la vida.

Dios ama a adoradores que le adoren

Las escrituras describen a Dios como nuestro novio y esposo: alguien que nos ama con ardor y pasión. Nosotros amamos a Dios porque estamos locamente enamorados de El. No lo podemos remediar. Se nos escapa de la boca en cada conversación, en cada pensamiento.
Dios ama escuchar el sonido de verdaderos adoradores que expresan su amor. Para El, los sonidos que brotan del corazón de un verdadero adorador son un incienso aromático, un sacrificio de alabanza.(Heb 13:10).
Hablando de amor ¿Recuerdas la primera vez que te enamoraste? Te sentías raro. Tenías un nudo en el estomago. Incluso comenzabas a sudar cada vez que comenzabas a pensar en esa persona especial. No podías quitártela de la mente; y cuando entraba por la puerta,!ah! no importaba lo que estuvieras haciendo o diciendo. Esa persona era tan especial, tan querida, que no existía mas en el mundo en ese momento.
Cuando amamos alguien parecemos realmente tontos. Hacemos tonterías y suspiramos. Escribimos poemas y perdemos horas y horas simplemente pensando, contemplando y disfrutando la presencia de nuestro ser querido. ¿por qué? Porque Dios nos ha hecho para expresar amor. Esto es una parte inherente de su imagen implantada en nosotros.
¡Amamos amar! Amamos soñar con la expresión del amor, sentir amor, beber de su belleza.
Eso es Dios en nuestro interior. Nosotros le amamos a El. PORQUE EL NOS AMO PRIMERO. (1Juan 4:19).
NO HE ADORADO VERDADERAMENTE HASTA QUE HAYA INVOLUCRADO TODO MI SER, TODO MI CUERPO, TODO DE TODO EN UNA ENCARNACIÓN DE MI PROFUNDO AMOR.

Agresividad en la Adoración

"Regocíjense los santos por su Gloria, y canten aún sobre sus camas. Exalten a Dios con sus gargantas y espadas de dos filos en sus manos".(Salmo 149:5-6)
Al llamarnos a la adoración, Dios se propone mucho mas que cultivar una banda de humildes adoradores: El esta preparando un ejercito de triunfantes guerreros. Es por eso que nuestro texto habla de que "exalten a Dios" junto con "espadas de dos filos".
Por supuesto aquí no se trata de armas de guerra carnal, sino de poner nuestras palabras en acción para ir valientemente adelante en la ofensiva de la fe actuando basados en las promesas del Dios que alabamos.Vaya de nuevo a esa dramática escena de 2Cron 20. El Rey Josafat con pocos soldados y relativamente indefenso, había oído: "Contra ti viene una gran multitud"(v.2). ¡Oiga eso! usted sabe, o conoce a alguien que lo sabe, el sentimiento de impotencia: se entera que una horrible enfermedad le da solo semanas o meses de vida; un informe del contador dice que el negocio se esta yendo a la quiebra; la persona amada le dice que esta rompiendo con usted por divorcio o abandono. Este texto da la orientación de lo que se debe hacer en tales momentos, algo mas que resignarse a una oración pasiva por fortaleza. Hay 4 pasos o maneras de tomar la espada de la adoración:
Primero. El rey proclamo ayuno.(v.3).¿ Es el ayuno algo ajeno a su experiencia? No permita que lo sea. Ayunar es una agresiva manera de afirmar el poder prometido del Espíritu sobre la carne. Es una manera explícita de reforzar la prioridad de la oración y de buscar a Dios a horas extraordinarias cada día. Cuando enfrente batallas cruciales como las que enfrentó Josafat prepárese a renunciar a la carne, como una señal de que su confianza no esta en la energía humana sino en el poder del Espíritu.
Segundo. El Rey y el pueblo oraron(V.6) y aunque en su oración confesaron que "en nosotros no hay fuerza"(v.12) en esta oración no querían decir "!Ay de nosotros!". En lugar de gemir rugieron, atribuyendo a Dios poder y autoridad sobre el enemigo. Tal oración de petición indudablemente procedió de una profunda necesidad, pero no obstante, afirma confiadamente el poder de Dios dentro de su voluntad.
Tercero. Hubo una recordación de la obra de Dios en la historia(v.7). Con alabanza recordaron la historia del pueblo de Dios, el éxodo de Egipto, el cuidado de Dios en el desierto, la conquista de Canaan. "Recordar" es una poderosa fuente de confianza en el hecho de que Dios puede y quiere nuevamente salvar. Meditar en testimonios o "rememorar" durante la cena del Señor es una manera de hacerlo.Y cuarto, hubo una declaración profética(vv.14-17).Este dispuesto a recibir la palabra profética del Espíritu Santo entre nosotros como un pueblo. El todavía nos asegura: "! No es vuestra la guerra sino de Dios!"(v.15)
Y el fielmente nos revelará la voluntad de Dios en relación a nuestras situaciones inmediatas.Situaciones singularmente amenazadoras requieren también una respuesta singularmente fuerte: tomar una "espada de dos filos" en un sentido espiritual confiando en Dios agresivamente, arrojándonos en adoración a sus pies enérgicamente, y blandiendo las armas espirituales que uso Josafat audazmente.
Estas acciones todavía son eficaces, para poner en fuga a la duda, el temor y la ansiedad.La alabanza no es pasiva. Puede ser nuestra actitud mas audaz contra las amenazas del enemigo.
LA ALABANZA EN LA ORACIÓN
2Cron 20:22-29
Salmo 84:8-12
Salmo 138
Hechos 4 :13-31

viernes, 3 de octubre de 2008

Cuando Dios me llama

Ex. 3:1-18 ; 4:1-9; 13-17 Consagración y servicio


I. El llamado
a) Dios llama a Moisés en un día ordinario y de trabajo vv.1. “Dios no usa vagos, ni los necesita!”.
b) Dios usará algo para llamar mi atención. Debo ver la zarza.
c) Dios me llamará por mí nombre vv.4. Es mi llamado, no debo fijarme ni envidiar en el llamado de otros.
d) A través del llamado, Dios quiere que primero lo conozca vv.6. y después su propósito, vv.10.
e) El llamado de Dios NO es para beneficio personal, sino para bendición de su pueblo, vv.7,10.

II. Las excusas: Dios respondió a cada objeción de Moisés1 Moisés volvió a preguntar: ¿Y qué hago si no me creen ni me hacen caso? ¿Qué hago si me dicen: El Señor no se te ha aparecido?2 ¿Qué tienes en la mano? preguntó el Señor. Una vara respondió Moisés.3 Déjala caer al suelo ordenó el Señor. Moisés la dejó caer al suelo, y la vara se convirtió en una serpiente. Moisés trató de huir de ella,4 pero el Señor le mandó que la agarrara por la cola. En cuanto Moisés agarró la serpiente, ésta se convirtió en una vara en sus propias manos.5 Esto es para que crean que yo el Señor, el Dios de sus padres, Dios de Abraham, de Isaac y de Jacob, me he aparecido a ti.6 Y ahora ordenó el Señor, ¡llévate la mano al pecho! Moisés se llevó la mano al pecho y, cuando la sacó, la tenía toda cubierta de *lepra y blanca como la nieve.7 ¡Llévatela otra vez al pecho! insistió el Señor. Moisés se llevó de nuevo la mano al pecho y, cuando la sacó, la tenía tan sana como el resto de su cuerpo.8 Si con la primera señal milagrosa no te creen ni te hacen caso dijo el Señor, tal vez te crean con la segunda.9 Pero si no te creen ni te hacen caso después de estas dos señales, toma agua del Nilo y derrámala en el suelo. En cuanto el agua del río toque el suelo, se convertirá en sangre.10 Señor, yo nunca me he distinguido por mi facilidad de palabra objetó Moisés. Y esto no es algo que haya comenzado ayer ni anteayer, ni hoy que te diriges a este servidor tuyo. Francamente, me cuesta mucho trabajo hablar.11 ¿Y quién le puso la boca al *hombre? le respondió el Señor. ¿Acaso no soy yo, el Señor, quien lo hace sordo o mudo, quien le da la vista o se la quita?12 Anda, ponte en marcha, que yo te ayudaré a hablar y te diré lo que debas decir.13 Señor insistió Moisés, te ruego que envíes a alguna otra persona.14 Entonces el Señor ardió en ira contra Moisés y le dijo:¿Y qué hay de tu hermano Aarón, el levita? Yo sé que él es muy elocuente. Además, ya ha salido a tu encuentro, y cuando te vea se le alegrará el *corazón.15 Tú hablarás con él y le pondrás las palabras en la boca; yo los ayudaré a hablar, a ti y a él, y les enseñaré lo que tienen que hacer.16 El hablará por ti al pueblo, como si tú mismo le hablaras, y tú le hablarás a él por mí, como si le hablara yo mismo.17 Pero no te olvides de llevar contigo esta vara, porque con ella harás señales milagrosas.

a) Yo no sirvo para eso, vv.11-12 Z “Yo estaré contigo”
b) No sé mucho acerca de Dios Z “Puedes depender de mí”
b) Nadie me va a creer vv. 4:1-9 Z “Te daré tres señales”
c) No sirvo para hablar en público vv.4:10-12. Z “Te enseñaré a hablar”. Dios nos capacitará para la tarea que nos ha encomendado
d) Mejor búscate otro vv. 4:13-17 Z “Aarón irá contigo”. Definitivamente Moisés NO quería ir.

III. Obediencia
a) Necesitamos santificarnos. Era tierra santa porque Dios estaba allí.
b) Renovar nuestro caminar. Quitarse las sandalias, un nuevo caminar en obediencia
c) El primer paso es creerle a Dios, el segundo es usar lo que tenemos




Tormentas, peces y la Presencia de Dios

Danilo Montero

Durante mi adolescencia acostumbraba asistir al Campamento Nacional de Jóvenes. Al recordarlo, comprendo que aquello era una búsqueda muy sincera, casi angustiosa. Lo digo porque el lugar no era NADA ACOGEDOR. Si no lográbamos llegar temprano, teníamos que ir a lo que llamábamos “el gallinero”: un galerón de madera y techo de zinc en donde podías usar de almohada los pies olorosos de algún desconocido. Allí teníamos que dormir varias decenas de nosotros acomodados en largas literas. El calor era excesivo, los insectos eran insaciables, las bancas eran duras como piedras, las filas para comer eran largas y los baños… bueno, no había baños… las letrinas, indescriptibles. A pesar de todo la bendición espiritual era fabulosa. Hubo noches que pasamos en vigilia. Recuerdo las reuniones saturadas de palabra y la visitación de Dios. Puedo decir sin lugar a dudas que esos fueron algunos de los mejores momentos de mi caminar cristiano. El camino de regreso era buenísimo también. El autobús se llenaba de incansables alabanzas, oraciones, risas y lágrimas. ¡Veníamos llenos! Sin embargo la euforia no duraba mucho. Pocas semanas después, estábamos enfrentando en las reuniones la misma indiferencia que antes. ¿Qué estaba mal? ¿Por qué razón parecía tan difícil sostener las vivencias espirituales?La Biblia nos relata la historia de un hombre que trató de escaparse del Señor. Su intento nos enseña algo importante: cómo evitar salir de la presencia de Dios. Jonás no era un cualquiera. Era un hombre ungido por Dios y predicarle a la capital del mundo era tarea de héroes en el espíritu, hombres que conocieran a Dios, ungidos, entrenados en los duros campos del Espíritu, gente dispuesta y obediente… La lista se revisó muchas veces. Nadie, en todo el reino, calificaba tanto como Jonás.Sin embargo la voz de Dios y el reto de la obediencia sacaron a la luz una actitud que había pasado inadvertida por años dentro del corazón del profeta. Probablemente Jonás dijo: “Un momento Señor, ya te conozco, vas a perdonarlos después de que yo predique. No quiero que eso pase. Ese lugar de incircuncisos debe pagar por lo que le ha hecho a tu pueblo”. Parece ser que Jonás era un hombre de pocas palabras; preguntó: “¿y dónde se supone que está Nínive?”. El dedo de Dios le señaló el camino hacia el este. El hombre se levantó de su silla y corrió calle abajo, hacia el oeste. Compró un boleto ‘one way’ y se embarcó en el primer barco que encontró lo pudiera llevar más lejos. Sin saberlo Jonás decide temerariamente escapar de su misión, pero más aún, de la presencia amorosa de Dios. Pronto, la piel bronceada del prófugo sintió el impacto frío de las gotas y la fuerte brisa anunció un cambio de planes. En pocos minutos los marineros estarían sosteniendo a Jonás de sus cuatro extremidades y sería lanzado al mar.Hay ocasiones en que nuestra torpeza para obedecer merece un empujón de parte de Dios. Los empujones de Dios a veces son circunstancias que parecen cambiar el rumbo de las cosas y nos hacen perder el control. Sin embargo, son las excusas de Dios para empujarnos hacia su corazón.El pez fue la respuesta de Dios a otro de los planes de huída de Jonás. La inmensa boca se abrió y comenzó a empujar cientos de litros de agua hacia el oscuro interior. Si alguien podía sentirse maltratado por la vida y por las circunstancias, ese era él; si alguien podía creerse lejos de Dios ese era Jonás. ¿Qué hubieras hecho en su lugar?Muchos dejamos de ir a la iglesia, otros culpamos a Dios; pero el muro que hay entre tú y tu Padre no lo constituye una pila de ladrillos de lugar, tiempo y espacio. ¿Te sientes acorralado por alguna situación? Jonás nunca había estado tan solo, tan lejos del mundo, de la luz y de su destino. Llegó al punto más bajo, donde los amigos no están, al sitio donde las puertas se cierran tras nosotros y las oraciones parecen no resultar. Jonás se volvió hacia su Dios. Su oración es un testimonio, una cantata a la fidelidad de Dios y una confesión… Tres días en el vientre del pez quebrantaron al profeta. Y en el quebrantamiento de su orgullo, encontró liberación.Jonás no pidió ser sacado de allí, sino que confesó su pecado. La cárcel que lo sostenía no era de piel animal, era de su corazón rebelde. No hay mayor esclavitud que la de aquél que está a merced de su propio egoísmo. No hay mayor libertad que la de aquél que ha rendido su voluntad en las manos de otro… cuando ese otro es Dios. Jonás se dio cuenta que sus ideas eran vanidad, renunció a fiarse más de su carne y tuvo que arrepentirse.“Más yo con voz de alabanza, te ofreceré sacrificios, pagaré lo que prometí”. Y cuando Jonás dijo eso, Dios lo mandó sacar del pez. ¿Qué es lo que promete un profeta? Lo que tú digas, diré; a donde tú me envíes, iré; lo que tú quieres que yo haga, eso es lo que haré.Cuando nuestro orgullo, vanidad e incredulidad se confiesan, entonces, viene la vivencia. Puede ser que estés en medio del tumulto de la ciudad o en la quietud de la montaña, Su presencia será tu delicia igualmente. Jonás descubrió que la presencia es mayor que las circunstancias, también aprendió que el corazón del hombre es el único muro que oscurece el resplandor de su presencia; y también pudo entender que para la dureza del alma, Dios tiene la medicina: el quebrantamiento. Y cuando él estuvo dispuesto a admitir su error, la tibia presencia del Padre volvió a revelarse en gracia hacia él.…Los grillos cantaban su serenata, mientras las luces comenzaban a encenderse a lo lejos de la ciudad. Solía pasar noches enteras en esa quietud y mientras disfrutaba el olor de los olivos viejos, su alma saboreaba la fragancia de la presencia tierna del Padre. Había sido un jardín de refugio… pero esta noche su único albergue sería la oración. Sus amigos roncaban, su alma temblaba, su compañera era la soledad. La plegaria se hizo angustiosa, tanto que entre gritos y sollozos su frente se bañó de un sudor sangriento.El dilema humano gritó desde el corazón de Dios. Jonás lloraba encerrado en un pez por desobediente, Jesús clamaba encerrado en un cuerpo mortal por obediencia. El pulso acelerado en la tierra, los ángeles de pie en el cielo. NUNCA NADIE ESTUVO MÁS SOLO, sus amigos huirían, su nación lo condenaría.El pasado y el futuro pesaban sobre Él. No era el horror de los clavos, ni el dolor de los golpes lo que le angustiaba. Tampoco la vergüenza de la cruz o lo ingrato del azote. Las espaldas del Padre eran su agonía. Conocer lo que el Dios-hombre no conocía, el rechazo de Dios era la muerte misma.Al colgar en la cruz y beber la maldición del pecado, Jesús sabía que lo último que verían sus ojos físicos sería el triste silencio y la espalda del Padre, y entonces la muerte vendría. “Más no mi voluntad, sino la tuya”… la respuesta esperada. La voz corrió tan rápido como la luz e iluminó los cielos con alabanzas y el infierno llenó de temor. Una sonrisa se pintó en el rostro del Padre y una lágrima corrió por su mejilla.Ahora el ‘cordero’ de Dios estaba listo para el sacrificio final. En su entrega, Jesús como Dios-hombre, descubrió el poder de la presencia de Dios. Los calambres crueles de la muerte no pudieron sacarle siquiera un gemido. ESTABA ENVUELTO POR LA GRACIA DE LA PRESENCIA DEL PADRE. Esa presencia era su fortaleza ante la aflicción, su consuelo ante el dolor, su apoyo ante el rechazo… y fue su última ofrenda ante la muerte misma.Colgado del madero y agonizante dijo: “en tus manos encomiendo mi espíritu… ¡TODO ESTÁ CONSUMADO!”. De inmediato, el velo del templo respondió a su grito y partiéndose de arriba abajo, nos dejó libre la entrada a la presencia de Dios. EL MURO CAYÓ. ¡Aleluya! Cuando Jonás entregó su orgullo, las circunstancias dieron paso a la presencia de Dios. Cuando Jesús entregó su voluntad, nos abrió camino al corazón de Dios. Cuando tú y yo rendimos nuestra vida diariamente a Dios, la realidad de la presencia del Padre con nosotros nos será develada. Las circunstancias no podrán alejarnos más… nuestros corazones permanecerán ligados al abrazo de su amor que todo lo ha vencido.
“Por lo cual estoy seguro de que ni la muerte, ni la vida, ni ángeles, ni principados, ni potestades, ni lo presente, ni lo porvenir, ni lo alto, ni lo profundo, ni ninguna otra cosa creada nos podrá separar del amor de Dios, que es en Cristo Jesús, Señor nuestro”.

Alabanza y Adoración

Estas dos palabras generalmente se emplean para referirnos a cantos rápidos (alabanza) y a cantos lentos (adoración), y está muy lejos de ser correcto a la luz de la Palabra de Dios. ADORACION. Si bien la Biblia nos enseña muchos ejemplos de adoración a Dios en relación a música y canto, no podemos simplemente creer que adoración es cantar cantos en ritmolento. La palabra “adoracion” significa rendirse, postrarse, someterse, reverenciar, obedecer, inclinarse, dar honor. Ahora bien, todas estas cosas no se pueden hacer a menos que exista una verdadera entrega incondicional hacia quien estoy adorando.Podemos arrodillarnos, levantar nuestras manos y decir Senor te amo pero si no hay obediencia en nuestro corazon hacia el, todavia no hemos experimentado lo que es adoración. La primera vez que encontramos la palabra adoración, es en Gen. 22:5: “…Entonces dijo Abraham a sus siervos: esperad aquí con el asno, y yo y el muchacho iremos hasta alli y adoraremos, y volveremos a vosotros…”En este pasaje podemos apreciar la escencia de lo que es adoracion. La historia nos relata que el iba a sacrificar a su propio hijo en obediencia a Dios, y todo ese momento de entrega, todo lo que esa accion significaba, todos los principios y valores mas profundos puestos en juego, a todo eso Abraham dice “adoraremos”. Abraham no estaba diciendo que se iban a cantar veinte minutos de cantos lentos sino simplemente estaba asegurando que la voluntad de Dios se haria sin titubeo alguno. Nota que dice en plural “adoraremos” y no en singular “adorare”,obviamente esta haciendo referencia a si hijo Isaac como adorador tambien, y ¿Cómo vemos en Isaac esto?, la Biblia no hace ninguna mención de que el muchacho se rehuso o quiso luchar para escaparse, y para que esto sucediera de esta manera, su padre le tuvo que haber ensenado que la relacion con Dios es lo mas elevado y sublime que existe –la adoración-.Podemos sacar varios principios aquí:
“Adoración es garantizar que la voluntad de Dios se hace”
“Adoración es perder tu vida para obtener la de Dios”
“Adoración es entrega absoluta al Senor obedeciendo en todo”.
“Adoración es entender que Dios es soberano y aceptarlo”.
“Adoración no es emocion, es fe”.
Un punto importante para mencionar es que Abraham dijo: “y volveremos”. ¡Que ejemplo de fe! Y el versiculo 10 dice que el extendio su mano para degollar al nino.¿Qué principios vemos aquí?:“mi adoración a Dios no depende del milagro”.“la adoración no pone condiciones”.“la adoracion es inquebrantable”.El concepto de Abraham de adoracion es algo que se ha perdido de vista en la iglesia contemporanea, hoy adoracion es simplemente cantar suavemente.¿Sabias que [pr esta adoracion de Abraham, fue llamado elpadre de todos nosotros (los de la fe) y el amigo de Dios? (Stg. 2:23; Rom. 4:16)Vemos que las palabras del Senor Jesus en Jn. 4:23-24 concuerdan perfectamente con los principios mencionados de la adoracion de Abraham:“…Mas la hora viene, y ahora es, cuando los verdaderos adoradores adoraran al Padre en espiritu y en verdad; porque tambien elPadre tales adoradores busca que le adoren.Dios es Espiritu; y los que le adoran, en espiritu y en verdad es necesario que adoren…”Aquí el Senor nos esta revelando el corazon del Padre y el enfasis es que Dios busca a personas (adoradores) que le dejen reinar en sus vidas (que adoren), y no simplemente canciones. “La adoración no es un tiempo en el programa del culto o de la reunión, sino que es un estado de ser, gracias a la naturaleza de Cristo en nosotros”. Es realmente la oración de todo el equipo que cada uno de nosotros nos podamos convertir en verdaderos adoradores.

Usa lo que Dios te ha dado

Rick Warren
Dios merece lo mejor de ti. Él nos formó con un propósito y espera que explotes al máximo lo que te ha dado. Él no quiere que envidies ni te preocupes de las habilidades que no posees, sino que te enfoques y uses los talentos que te ha dado. Cuando intentas servir a Dios de maneras para las que no estás formado, es como meter un cubo a la fuerza dentro de un círculo, es frustrante y produce resultados limitados. También es una pérdida de tu tiempo, de tu talento y de tu energía. La mejor manera de vivir tu vida es sirviendo a Dios de acuerdo a tu forma, para lo cual debes descubrir tus dones, aprender a aceptarlos y a disfrutarlos de modo que puedas desarrollarlos a su máxima expresión.Descubre tu formaLa Biblia dice: “No actúes desconsideradamente, sino trata de encontrar y hacer lo que sea que el Señor quiere que hagas” (Efesios 5:17, BAD). No dejes que otro día se te vaya. Comienza a encontrar y clarificar lo que Dios quiere que seas… y hazlo.Comienza evaluando tus dones y recursos. Tómate un tiempo, mira honestamente en lo que eres bueno y en lo que no lo eres. Haz una lista. Pregúntales a otras personas su opinión sincera. Diles que estás buscando la verdad y no cumplidos.Los dones espirituales y las habilidades naturales son siempre confirmados por otros. Si piensas que has sido dotado para ser maestro o cantante, y otra persona no está de acuerdo contigo, ¿qué crees? Si quieres saber si tienes el don de liderazgo, ¡pues mira sobre tus hombros! Si nadie te sigue, no eres un líder.Haz preguntas como estas: ¿Dónde he visto frutos en mi vida que otras personas puedan confirmarlos? ¿En qué he visto que soy exitoso? La evaluación de tus dones espirituales y los inventarios de tus habilidades pueden tener valor, pero son limitados en su utilidad. En primer lugar, están estandarizadas de manera que no cuentan dentro de tu singularidad. Segundo, no hay definición de los dones espirituales enlistados en la Biblia; de manera que cualquier definición es arbitraria y representa casi siempre un prejuicio denominacional.“Por cuanto nosotros mismos hemos sido moldeados en todas estas partes, excelentemente formadas (...) sigamos adelante y seamos aquello para lo que fuimos creados” (Romanos 12:5, PAR).La mejor manera de descubrir tus dones y habilidades es experimentando en las diferentes áreas de servicio. Yo pude haber tomado cientos de exámenes para determinar mis dones y habilidades cuando era joven, y nunca haber descubierto que recibí el don de la enseñanza ¡porque nunca enseñé! Sucedió solo después de que comencé a aceptar oportunidades para hablar que vi más resultados, recibí confirmación de otros, y me di cuenta de que “¡Dios me había dotado para que hiciera eso!”Muchos libros llegan a descubrir este proceso al revés. Enseñan: “Descubre tu don espiritual para que conozcas qué ministerio se supone que tienes”. Realmente esto opera de manera opuesta. Comienza sirviendo, experimenta en diferentes ministerios y descubrirás tus dones. Hasta que realmente no te involucres en el servicio, no sabrás para qué eres bueno. Tienes docenas de habilidades y dones escondidos que no sabes que los tienes, porque nunca los has puesto a prueba. Así que te exhorto a que hagas cosas que nunca antes has hecho. No importa cuán viejo seas, te insto a que no dejes de experimentar. He conocido muchas personas que han descubierto talentos escondidos a sus setenta y ochenta años. Conocí a una corredora de noventa años que ganó una carrera de diez kilómetros, sin descubrir que disfrutaba correr ¡hasta que llegó a los setenta y ochos años de edad!No trates de encontrar tus dones antes de enrolarte a servir en algo. Simplemente, empieza a servir ya. Descubre tus dones involucrándote en el ministerio.Intenta enseñar, dirigir, organizar, tocar un instrumento o trabajar con los jóvenes. Hasta que realmente no te involucres en el servicio, no sabrás para qué eres bueno. Si no funciona, llámalo “experimento”, no fracaso. Eventualmente descubrirás para qué eres bueno. Considera las oportunidades y la personalidad. Pablo aconsejó: “Haz una exploración cuidadosa de quién eres y el trabajo que estás haciendo para que entonces te sumerjas en él” (Gálatas 6:4b, PAR). Otra vez, esto ayuda a recibir retroalimentación de quienes mejor te conocen. Pregúntate a ti mismo: ¿Qué es lo que realmente disfruto hacer? ¿Cuándo me siento vivo completamente? ¿qué es lo que hago cuando pierdo la noción del tiempo? ¿Me gusta la rutina o la variedad? ¿Prefiero servir en equipo o por mí mismo? ¿Soy introvertido o extrovertido? ¿Soy más pensador que perceptivo? ¿En qué disfruto más, compitiendo o cooperando?Examina tus antecedentes y extrae las lecciones que aprendiste. Revisa tu vida y piensa en cómo ha sido formada. Moisés les dijo a los israelitas: “Recuerden hoy lo que han aprendido acerca del Señor a través de sus experiencias con él” (Deuteronomio 11:2, PAR). Raras veces vemos el buen propósito de Dios en el dolor, el fracaso o la vergüenza mientras lo vivimos. Cuando Jesús le lavó los pies a Pedro, le dijo: “Tú no sabes ahora lo que estoy haciendo, pero después lo entenderás” (Juan 13:7). Solo en retrospectiva entendemos cómo Dios usa los problemas para bien. Extraer las lecciones de tus experiencias toma tiempo. Te recomiendo que tomes un fin de semana completo para un retiro, y hagas una revisión de tu vida, en la que puedas hacer un alto para que veas cómo Dios ha trabajado en momentos decisivos en tu vida y consideres cómo quiere que uses esas lecciones para ayudar a otros.